Reflexión que Nacho Celaya, profesor de Secundaria, nos envía sobre la próxima convocatoria de huelga.
Querida amiga del alma… Después de haber compartido tantos días de lucha, el viernes te escuché susurrar… bajito… como una pregunta sincera lanzada al viento de la desolación… que tienes dudas con respecto a la Huelga General del próximo día 9…
No es mi intención convencerte de nada, ni siquiera lanzarte el más mínimo reproche… He repetido muchas veces que todas las posturas me parecen respetables, porque las entiendo… pero sí me gustaría que todo el mundo - antes de decidir- se comprometiera a darle una vuelta seria a lo que está pasando, desde una mirada generosa y solidaria…, responsable y Política, en su mejor versión… más allá de su ombligo…, aunque ahora su ánimo esté quebrado y su esperanza dañada…
Y por eso me apetece contarte, como un gesto normal de complicidad de alguien que quiere que sigamos caminando juntos/as, lo que yo pienso…
Ya se que hay muchos compañeros/as que se preguntan… Servirá para algo? Llevamos tanto tiempo movilizándonos y no pasa nada? Si fuera una huelga general, sería otra cosa…? Unos con un deseo honesto de encontrar respuestas, lo se… y creo sinceramente, que otros/as construyendo una excusa que les tranquilice la conciencia, para justificar una decisión que ya tienen, legítimamente, tomada hace tiempo…
Por mi parte… Te confieso que ando profundamente preocupado con “esas preguntas”, aparentemente sensatas e inocuas… porque tengo la sensación de que, cuando uno/a se pregunta tanto por esto del “servir”, de la “eficacia”… en el contexto de una lucha desigual en el mundo educativo… Me parece que de una manera sustancial, lo que nos preocupa y nos mueve… solo es lo que nos pisa el callo… NUESTRO CALLO… Lo que nosotros/as pensamos que es intolerable y que sería sencillo de solucionar… Mi problema…
Y, esa percepción tan generalizada y con una capacidad desmovilizadora tremenda…, no lo había formulado nunca con tanta crudeza, pero a mi, a estas alturas, de determinada gente…., esas dudas… me hacen mucho mas daño que la propia Ley…
PERO ES PRECISAMENTE ESE DESÁNIMO LO QUE YO QUIERO QUE UNA HUELGA COMO ESTA AYUDE A CAMBIAR, por lo menos un poquito… Porque hoy más que nunca, necesitamos espíritus revolucionarios, que miren al mundo en su globalidad…, que se preocupen de los pequeños/as, de los que menos pueden…, que levanten la vista, para percibir lo esencial, lo que construye una sociedad más libre y responsable…